El sendero a media ladera entre Valvanera y Anguiano es como un largo tubo digestivo: entras por un lado y solo puedes salir por el otro. No hay pistas intermedias ni posibilidad de escape, ni hacia arriba ni hacia abajo. Debió de ser la vía de conexión entre los corrales y las majadas que hubo por la zona. A juzgar por la hierba que había en algunos tramos, parece muy poco transitado y si se mantiene aún, debe de ser por su condición de enlace con el GR-93
Ocho y media en el aparcamiento de abajo del monasterio
la entrada, a la derecha de la bionda
oscuro y fresco como un tubo
habíamos leído que este primer tramo era un poco lioso de arbustos y senderos, pero lo cierto es que no hubo pérdida
en cuanto hay un claro hay un poste del GR para no perderse
y alguna señal (aunque algo despintadas ya) en algún árbol
aprovechamos los claros para contemplar las montañas que nos rodean: mirando al Gomare
y para adelante otra vez
la primera subida acaba en esta campa donde hay un letrero medio caído y un poste del GR al fondo
desde allí se avista la profunda V que tenemos que hacer para cruzar el primer arroyo
el ambiente cambia radicalmente
el sendero baja bastante y casi no se ve
el paso del río es una fiesta para Greta pero el paso de personas está poco elaborado...
desde el fondo del barranco vemos Roñas y detrás el alto de la Agenzana y el San Cristóbal
un poco más a la derecha el Cabezo del Santo
que merece una foto con zoom
el arroyo de la segunda V estaba menos cerrado de vegetación que el anterior
justo después de cruzar este segundo arroyo se pasa por encima de las ruinas de un gran corral con una caseta de la que aún se ven las tejas
a partir de ahí hay un tramo de sendero más ancho
aunque enseguida vuelve a cambiar la vegetación
pasado el km 6 llegamos al lomo más acentuado de todo el recorrido (ver punto amarillo en el track) y decidimos almorzar
me tendría que peinar antes de hacerme las selfies....
justo enfrente, el lomo del Roñas y la pista que entra por detrás
acabado el almuerzo, vuelta al sendero
y más arroyos frescos que cruzar
poco a poco el sendero se va abriendo
la fuerte polinización de las coronillas acabaron por congestionarme la nariz
llegamos a la majada más amplia del recorrido y el sol empezaba a cascar
atrás queda el lomo donde habíamos almorzado y al fondo el Gomare; en el lomo de la derecha se adivina el trazado del sendero
un gran prado hacia arriba sin pastar aún
en llegando a esas rocas...
... se ve ya Anguiano y comienza la larga y sostenida bajada
ahí se ve el sendero entre las coronillas amarillas
aunque en los rincones volvemos a ver helechos
la variedad de paisajes es impresionante
más adelante aparecen unos corrales y un camino más ancho
pero hay que dar otra vuelta más a la izquierda
y volver a pasar otro arroyo
a partir de los corrales el sendero es ya un camino
llegando a Anguiano pasamos por una cabaña restaurada en el 2013
la entrada al camino/sendero a Cervancos, la ruta más frecuentada a Valvanera
llegada a Anguiano, rodeado de peñas
la represa del Najerilla y el cementerio componen otro bello paisaje mirando a la derecha
a la izquierda, la iglesia del barrio de Cuevas y la estribaciones de San Quiles
Completamos el paseo con una clara en el bar de la Herradura (a televisión puesta, claro, para que los de la España rural estén perfectamente informados de las intrigas de la Corte y el adoctrinamiento político no cese ni un minuto) y a por el coche a Valvanera.
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